Los pistachos son un fruto seco saludable y perfecto para picar entre horas.

Los pistachos son un fruto seco saludable y perfecto para picar entre horas. Pixabay

Nutrición

Estas son las tres enfermedades graves en España que se evitan comiendo pistachos

El pistacho es un fruto seco altamente nutritivo que ofrece múltiples beneficios para la salud, gracias a su rica composición en nutrientes, antioxidantes, y ácidos grasos saludables. 

20 febrero, 2024 16:28

Cuando pensamos en alimentos que sean saludables y positivos para nuestra salud, es habitual que se nos vengan a la cabeza los frutos secos, asociados con numerosos beneficios para el organismo. Entre todos ellos hay uno que podemos denominar un "superalimento", que es el pistacho, cuyas propiedades ayudan a combatir distintas enfermedades.

En este sentido, diferentes estudios han podido concluir que se trata de un gran aliado para hacer frente a distintas enfermedades graves para la salud, reduciendo con su consumo el riesgo de sufrir un infarto de miocardio, un ictus e incluso una muerte por causas cardiovasculares.

Desde la Fundación Española de la Nutrición (FEN) se ha hecho hincapié en distintas ocasiones del perfil nutricional saludable de los pistachos, destacando especialmente su riqueza en grasas insaturadas y bajo contenido en grasas saturadas, además de su contenido en distintos nutrientes y minerales, tales como potasio, fósforo, hierro, magnesio, folatos, tiamina, calcio, zinc y vitaminas. Todo ellos, en combinación con fitoquímicos como carotenoides, tocoferoles y compuestos fenólicos, llevan a este fruto seco a ser un alimento excepcional para disfrutar de una mayor salud.

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Existe la falsa creencia de que los frutos secos favorecen el aumento de peso, pero la realidad es que con una ingesta moderada no hay riesgo de engordar ni de llegar a padecer obesidad. Además, en este caso en particular destaca por su efecto saciante, que ayuda precisamente a tener un control sobre el peso corporal.

De esta forma, teniendo en cuenta todo lo anterior, los pistachos, además de tener un gran sabor, son un gran aliado para prevenir la salud, más aún teniendo en cuenta que ayuda a combatir tres enfermedades.

Las tres enfermedades que los pistachos ayudan a combatir

Introducir pistachos en una dieta equilibrada es sencillo y además muy recomendable, en especial para combatir estas tres enfermedades:

  • Enfermedades cardiovasculares: la enfermedad cardiovascular es una de las principales causas de mortalidad y morbilidad en todo el planeta. Por este motivo, es importante alimentarse con productos que ayuden a reducir las posibilidades de su aparición, estando demostrado que incluir pistachos en una dieta mediterránea ayuda a reducir el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares, infartos de miocardio y muerte por causas cardiovasculares. De esta manera, existe una evidencia científica de que el consumo regular de este fruto seco favorece una mayor salud del corazón.
  • Hipertensión arterial: muy relacionado con el punto anterior, nos encontramos con la hipertensión arterial, un problema de salud que se puede combatir con un consumo regular de pistachos. Este alimento tiene la capacidad de ayudar a reducir la presión arterial, lo que reduce la probabilidad de sufrir infartos, trombosis cerebrales o aterosclerosis.
  • Diabetes Tipo 2: la tercera enfermedad que se puede combatir con la ingesta de este fruto seco es la diabetes tipo 2, ya que el consumo habitual de pistachos mejora la resistencia a la insulina y reduce el aumento de los niveles de glucosa en sangre tras las comidas.

¿Cuántos pistachos se deben comer al día?

Los pistachos ofrecen grandes beneficios nutricionales para la salud, pero hay que ser conscientes de que tienen un importante aporte calórico, con unas 613 kcal por cada 100 gramos de productos. Por norma general, los frutos secos aportan un gran contenido calórico, lo que implica la necesidad de conocer las raciones recomendadas y no consumirlos en exceso.

En el caso particular de los pistachos, la ración recomendada diaria se sitúa entre los 30 y 40 gramos, lo que equivale a unos 40-50 pistachos de tamaño medio con cáscara. De esta forma, siguiendo esta recomendación, con un consumo de unos 35 gramos de pistachos sin sal y con cáscara, se estarían ingiriendo menos de 100 calorías, una ración que permitiría un aporte suficiente de grasas saludables, fibras y proteínas.

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En este sentido, es necesario destacar que deben ser pistachos sin sal añadida, ya que en el momento en el que se agregan sales u otros aditivos, los valores nutricionales originales se ven modificados y la ración recomendada sería inferior.

Por otro lado, hay que saber que, aunque tengan un alto contenido calórico, sus beneficiosas propiedades para la salud y su efecto saciante hace que sean muy recomendados por parte de dietistas y nutricionistas para ser utilizados tanto en dietas enfocadas a la pérdida de peso como para poder disfrutar de un mejor estado de salud general.

Cómo consumir pistachos

La manera más sencilla de comer pistachos es hacerlo de forma natural, es decir, removiendo la cáscara que los recubre y consumirlos a modo de snack. De hecho, este fruto seco se puede consumir crudo, tostado o junto a otros ingredientes en diferentes recetas y elaboraciones, tanto dulces como saladas.

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Tomar un puñado de pistachos como tentempié es una excelente forma de picar entre horas, pero también podrás recurrir a este fruto seco en tus platos para incrementar sus nutrientes y darle un toque de sabor.

En este sentido existen muchas posibilidades, como la de elaborar una sabrosa mantequilla de pistachos, para lo cual solo tendrás que pelarlos y tostarlos al horno a una temperatura de 180 grados centígrados por espacio de unos 8 minutos y removiendo de vez en cuando. Tras dejar que enfríen, colócalos en una batidora hasta conseguir una crema, que posteriormente podrás aplicar sobre tus tostadas de pan a la hora del desayuno, una magnífica manera de poder disfrutar de todos los beneficios de este fruto seco desde primera hora del día.