Los alquileres de temporada continúan ganando adeptos. Durante el primer trimestre de 2024, el peso de esta modalidad de arrendamiento alcanzó el 11% del mercado, con un incremento interanual del 56%. Durante el mismo periodo, la oferta de alquileres permanentes se redujo un 15%, según detalla Idealista. 

Esta fluctuación se debe a que los alquileres de temporada 'escapan' a la regulación de la Ley de Vivienda. Estos se rigen por la Ley de Arrendamientos Urbanos y por el Código Civil, quedando fuera, por tanto, de la aplicación de la norma. Entre otros aspectos, no se ven afectados por las limitaciones en las actualizaciones de rentas o las prórrogas extraordinarias del contrato. Los alquileres permanentes, por contra, si están sujetos a la nueva Ley. 

"Los datos del primer trimestre siguen poniendo de manifiesto que legislar de espaldas a los propietarios acaba destruyendo el mercado. Las medidas adoptadas en materia de alquiler han trasladado la oferta del alquiler permanente al alquiler de temporada, una fórmula perfectamente legal pero que viene a dificultar aún más el acceso a la vivienda de las personas y las familias más desfavorecidas", señala.

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El próximo 27 de abril se cumple un año de la tramitación en el Congreso de la Ley de Vivienda, iniciativa que el Senado refrendó el 17 de mayo del curso pasado. Desde entonces, la norma ha sido objeto de crítica por parte de todo el sector: sindicatos de inquilininos, constructores, propietarios, centros de estudio y portales inmobiliarios, entre otros, piden cambios en la Ley. 

"Entre los grandes mercados el mayor incremento de la oferta de temporada se ha dado en Palma y Málaga, que cuentan con un 79% más que hace un año, seguidos por San Sebastián (77%), Sevilla (74%), Valencia (62%), Madrid (56%) y Barcelona (53%). En Bilbao, por su parte, la oferta de alquileres temporales ha crecido un 49% en los últimos 12 meses, mientras que se ha incrementado un 29% en Alicante", señala el informe de Idealista. 

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En Cataluña, la única región que desarrolla todas las disposiciones de la Ley de Vivienda, el stock de alquileres permanentes -eso que sí regula la norma- ha caído un 13% en tan sólo un mes de aplicación de las 'zonas tensionadas'. 

"Los mayores y más espectaculares incrementos de oferta de este tipo se han dado en pequeños mercados donde este fenómeno era hasta ahora prácticamente inexistente y en los que la aparición de un puñado de anuncios ha provocado subidas muy pronunciadas. Son los casos de Badajoz (2.560%), Cáceres (800%), Huelva o Lleida (650% en ambos casos). Por el contrario, en cuatro capitales los alquileres temporales se han reducido durante este año: Lugo (donde han desaparecido), Teruel (-67%), Palencia (-33%) y Ávila (-33%)", señala el documento. 

Los permanentes caen

El principal problema para los inquilinos es que los alquileres permanentes siguen cayendo en los principales caladeros del país. El mayor descenso se da en Bilbao (-33%), seguido por Sevilla (-27%), Madrid (-24%), San Sebastián (-22%), Palma (-20%) y Barcelona (-15%).

Tan sólo hay dos grandes mercados que se libran de esta caída: Valencia (4%) y Málaga (2%). 

"Entre el resto de ciudades la mayor caída se ha dado en Córdoba (-66%), Oviedo (-46%), Palencia y Ávila (-41% en ambos casos), mientras que las mayores subidas se han producido en Cuenca (35%), Girona (23%), Soria (17%), Almería (15%), Huelva (13%) y Teruel (11%)", señala Idealista. 

La semana pasada, el Fondo Monetario Internacional (FMI) avisó a España de que su política en vivienda, en concreto, aquella que tiene que ver con el tope a los alquileres, puede no ser la receta necesaria para la situación que vive el país. El Gobierno, por el momento, descarta un cambio en el guión.