Ayer, la compañía anunció que en los seis primeros meses de su año fiscal obtuvo un beneficio neto atribuido de 663 millones de libras (769 millones de euros), lo que representa un avance del 25,8% respecto del mismo periodo del ejercicio anterior. Las ventas de la multinacional en el semestre sumaron 9.734 millones de libras (11.287 millones de euros), un 1,8% más en cifras absolutas.

Estos resultados se justifican gracias a la buena evolución de estos dos negocios de los que la compañía espera mucho más rendimiento. La dueña de Primark confía en que su negocio de azúcar mejore de forma “sustancial” su rentabilidad beneficiándose de una cosecha de remolacha algo “más típica” y un buen nivel de producción en British Sugar. 

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Asimismo, de cara al cierre del ejercicio fiscal prevé que los ingredientes necesarios para desarrollar su negocio de panificación y pastelería a través de la división AB Mauri “tengan un buen desempeño”.

“Seguimos esperando que la agricultura avance a medida que los mercados mejoren y que se integren y aprovechen las adquisiciones de los últimos dos años”, indicó la compañía en la presentación de sus resultados. 

El pasado año, el negocio del azúcar se disparó gracias, en parte, a su elevado precio. En concreto, en España el precio del azúcar en marzo de 2023 duplicó al del mismo mes de 2022, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

No obstante, en lo que va de año los precios se han mantenido estables. Y con respecto al año pasado, en el mes de marzo de 2024 solo han crecido un 3,9% en nuestro país. 

Negocio más desconocido

Dentro de Associated British Foods, Primark siempre ha sido la marca estrella o al menos la más conocida. Pero lo cierto es que el negocio del azúcar, mucho más desconocido para el ciudadano de a pie, es desde hace muchos años también un buque insignia del grupo. 

De hecho, en España están presentes a través de Azucarera, empresa que compraron a finales de 2008 a Ebro Puleva por un importe de 526 millones de euros. Y en 2016 ABF llegó a un acuerdo para la adquisición por 5.600 millones de rands (326 millones de euros, por aquel entonces) del 48,65% que aún no controlaba en la compañía sudafricana Illovo Sugar. Además, en Inglaterra es propietaria de British Sugar.

También tiene operaciones de azúcar de caña en Eswatini, Malawi, Mozambique, Sudáfrica, Tanzania y Zambia y un negocio de azúcar de remolacha en el noreste de China con dos plantas que producen más de 180.000 toneladas de azúcar al año.

En total, esta división emplea a 30.000 personas y operan 20 plantas en nueve países, con capacidad para producir unos 4,5 millones de toneladas de azúcar al año. 

Por su parte, la división de ingredientes para panificación y pastelería es más reciente que la del azúcar y casi más desconocida aún. Engloba negocios de levadura e ingredientes de panadería, así como en ingredientes especiales para las industrias alimentaria, de nutrición humana y animal y farmacéutica, entre otras. 

Cuenta con más de 1.200 empleados y presta servicios a clientes en más de 50 países desde sus instalaciones en 15 países de Europa, América e India.