Hace años que las rutinas de belleza coreanas triunfan en Occidente. Cualquier producto de cosmética que llegue a España procedente de este país asiático es recibido con honores por todos aquellos que ansían una piel de muñeca de porcelana.

Pero cuidarse la piel no es solo cuestión de cremas, hay más cosas que se pueden (y se deben) hacer para tener una piel sana. La primera y principal, protegerse del sol, algo que las asiáticas llevan a rajatabla. Al contrario que en nuestra cultura, la piel bronceada no es algo atractivo para los asiáticos, por eso, vigilan mucho su exposición al astro rey.

La segunda forma de cuidar la piel es hacerlo desde dentro, cuidando lo que comemos y eligiendo alimentos nutritivos que aporten proteínas, vitaminas, minerales y grasas buenas que ayudan a construir y reparar los distintos tejidos de nuestro cuerpo. Algo que también está muy presente en la cocina coreana, en la que abundan los platos a base de carne, pescado y verduras.

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Razones para cuidar nuestra piel

La piel es el órgano vital que nos protege del exterior y cumple una serie de funciones que son razones de peso para cuidarla más allá de por el placer de lucir más guapos.

• Nos protege: Es la barrera que impide el paso de los agentes externos nocivos como virus o bacterias a los que estamos expuestos a diario.
• Regula la temperatura corporal: Cuando hace calor, la sudoración ayuda a enfriar el cuerpo manteniendo la temperatura corporal.
• Nos permite tener sentido del tacto: Gracias a las terminaciones nerviosas que tenemos en la piel podemos detectar la presión, el dolor o la temperatura. Podemos diferenciar texturas y es una forma más de percibir lo que nos rodea para poder actuar en consecuencia.
• Sintetiza vitamina D: Puede convertir la radiación ultravioleta en vitamina D, esencial para cuidar los huesos.

Alimentos para cuidar la piel

Los alimentos ricos en vitaminas, minerales, proteínas y grasas saludables como las omega-3 son buenos aliados para una dieta saludable, especialmente cuando se consumen crudos o se someten a cocciones amables que preservan sus nutrientes.

Algunos alimentos que podemos incluir en la dieta para mantener la piel bonita son:

• Zanahorias: Son ricas en vitamina A, que ayuda a mantener la piel saludable y radiante.
• Espinacas: Contienen antioxidantes como la vitamina C, que puede ayudar a combatir el daño causado por los radicales libres.
• Aguacates: Son una maravillosa fuente de grasas saludables, como los ácidos grasos omega-3, que pueden ayudar a mantener la piel hidratada y flexible.
• Nueces: Contienen ácidos grasos omega-3 y vitamina E, que pueden ayudar a mantener la piel suave y protegida.
• Pescado graso: Como el salmón, la caballa y el atún, son ricos en ácidos grasos insaturados omega-3, que pueden ayudar a reducir la inflamación en la piel.
• Tomates: Son ricos en licopeno, un antioxidante que puede proteger la piel del daño causado por el sol. Para aprovecharlo mejor, se recomienda cocinar el tomate, por ejemplo, asándolo en el horno o en la freidora de aire.
• Té verde: Contiene unos antioxidantes llamados catequinas, que pueden ayudar a mejorar la elasticidad de la piel y protegerla contra el daño solar.
• Frutas cítricas: Las naranjas, limones y pomelos son ricos en vitamina C, que puede ayudar a estimular la producción de colágeno en la piel.
• Brócoli: Contiene vitamina C y antioxidantes que pueden ayudar a reducir el daño causado por los radicales libres y mantener la piel saludable.
• Pimientos rojos: Son una fuente importante de vitamina C -aportan más que las naranjas- y antioxidantes que pueden ayudar a mantener la piel joven y radiante.

La receta coreana que lo tiene todo para cuidarte la piel

Esta ensalada de pescado crudo, verduras y arroz (hoedeopbab) es algo a medio camino entre un poke hawaiano y un sushi picante, pero muy fácil de hacer. El picante, como siempre, se puede modular en función de los gustos y tolerancia de cada uno, aunque es un gran aliado cuando se desea o se necesita reducir la cantidad de sal en las comidas.

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Al ser un plato elaborado con pescado crudo, es importante que este cumpla todas las garantías sanitarias que nos aseguren que no contiene anisakis. En caso de dudas, debemos congelarlo al menos durante 48 horas y descongelarlo en la nevera antes de utilizarlo.